​Casi seis días al año. Es el tiempo que los conductores pasan de media atrapados en atascos de tráfico en Bucarest, la ciudad con más embotellamientos del mundo. Es decir, 134 horas al año. Más que New York, Moscú, Bogotá, París y Londres, según un estudio elaborado por INRIX, una conocida aplicación de tráfico.