​El Consejo Superior de Magistratura (CSM) de Rumanía manifestó este martes su apoyo a la jefa de la Fiscalía Anticorrupción (DNA), Laura Codruta Kovesi, después de que el Gobierno iniciara el pasado jueves el proceso de destitución al alegar que violó la Constitución y perjudicó la imagen del país en el extranjero. “Hemos decidido rechazar la solicitud del ministro de Justicia (Tudorel Toader) sobre una posible destitución de la función de fiscal jefe del DNA”, declaró Codrut Olaru, vicepresidente del CSM, institución que vela por la independencia de la justicia en el país balcánico.

Laura Codruta KovesiFoto: Agerpres

El aviso del CSM no es vinculante, aunque servirá de argumento para que el presidente Klaus Iohannis, quien siempre ha defendido a Kovesi, lo utilice en favor de la fiscal jefe. El CSM rechazó las acusaciones contra Kovesi: entrometerse en decisiones de la Corte Constitucional y empeorar la imagen del país al criticar la reforma judicial que fue aprobada en diciembre por el Parlamento gracias a la mayoría que gozan el Partido Social Demócrata (PSD) y Alianza de los Liberales y Demócratas (ALDE).

Incluso, esta institución recordó que los fiscales gozan del derecho a expresar sus opiniones sobre textos jurídicos. Horas antes, mil magistrados firmaron una petición en la que advierten de que la petición de Toader amenaza la independencia de la justicia y que generaría más presión sobre los fiscales, al dejar su suerte a un posible despido. El pasado domingo, unas cuatro mil personas protestaron en las principales ciudades de Rumanía para expresar su respaldo a la fiscal jefe del DNA.