El presidente de Francia, Emmanuel Macron, advirtió hoy en Bucarest, en su primera gira por la Europa del este, de que el espacio Schengen debe reformarse, puesto que “no funciona bien”, al mismo tiempo que mostró su apoyo a la adhesión de Rumanía. “Ya, desde hace muchos años, tenéis el derecho de pedir el ingreso al espacio Schengen. No tengo ninguna ideología en este sentido, estoy totalmente abierto a este tema. Pero, debo ser sincero, el espacio Shengen no funciona bien y, por supuesto, no podemos alegrarnos de esto”, señaló Macron.

Emmanuel Macron si Klaus Iohannis, la CotroceniFoto: Agerpres/EPA

“Mi intención pasa que, en los próximos meses, podamos acelerar una reforma de las reglas comunes en este campo, que las clarifiquemos, que tengamos una actitud más solidaria, un mejor control de las fronteras, una creciente convergencia respecto a las normas sobre asilo y acogida de los ciudadanos de fuera de la UE”, agregó el presidente francés.

Macron abundó que se “debe transformar indispensable el espacio sin fronteras y una buena parte de las reglas sobre la protección de las fronteras y la gestión del asilo y de la inmigración”.

El jefe de Estado galo explicó que han existido reticencias por parte de algunos Estados miembros de la UE, que temían la entrada masiva de inmigrantes si Rumanía y Bulgaria formaban parte del espacio, pero aseguró que la realidad muestra que esto “pasa de todas maneras”.

Macron aprovechó la visita, que terminará mañana en Varna, para invitar a Rumanía a colaborar en la definición de la Europa del futuro.

“Estamos dispuestos a trabajar juntos en la ‘Hoja de Ruta’ para el futuro de la Unión Europea, para la zona euro y para todos los pasos que deben acometerse”, dijo el dignatario francés.

Iohannis aceptó está invitación al afirmar que Rumanía “es un Estado miembro maduro”, tras diez años desde su ingreso, “con un fuerte perfil europeo, que desea ser miembro refundador de la Unión Europea”.

En cuanto a la la directiva que regula la situación de los empleados comunitarios desplazados a otros países de la Unión Europea, Macron espera alcanzar un acuerdo hasta finales.

“Estoy seguro de que llegaremos a un acuerdo hasta finales de año -que pueda ser aprobado durante la presidencia estonia- para poder clarificar el marco de este proceso”, afirmó Macron en una rueda de prensa conjunta con su homólogo Klaus Iohannis.

La actual norma permite que las empresas paguen a esos trabajadores, mayoritariamente de países del Este, un salario que no sea superior al sueldo mínimo del Estado de acogida, lo que genera diferencias salariales con los trabajadores locales.

En cambio, Iohannis precisó que no puede decir que está de acuerdo o no con la idea de reformular la directiva europea, aunque aseguró que resulta “inadmisible” de que existan tantas críticas sobre esta norma, lo que demuestra que debe mejorarse.

“No estoy a favor ni en contra; hay muchos aspectos, algunos de ellos técnicos, que deben ser debatidos por especialistas”, señaló el jefe de Estado rumano.

“Existe, por una parte, una gran insatisfacción en Francia de que hay trabajadores que aparentemente intentan eludir el sistema en lugar de encajar en él, por otro lado, podemos observar de que hay muchas personas en Europa del este, por ejemplo en Rumanía, que quieren trabajar en España, Alemania y Francia”, prosiguió Iohannis.

“Si esta situación está así, está claro que debemos mejorar esta Directiva. Es inadmisible ver esta insatisfacción, por un lado, en Europa occidental y, por otro lado, el deseo de las personas del Este de vivir mejor”, puntualizó el presidente rumano