Bucarest aseguró este jueves que el sistema de escudos antimisiles en la base de Deveselu “no está dirigido contra Rusia”, horas después de que Rusia calificara a Rumanía de “clara amenaza” para convertirse en “puesto de avanzada de la OTAN”.

Una din cele trei baterii cu interceptoare de la DeveseluFoto: Hotnews

“Rumanía ha puesto en relieve de manera constante tanto públicamente como en los contactos con los socios que el sistema de defensa antimisiles, acogido en nuestro país en Deveselu, no está dirigido contra Rusia”, afirmó el Ministerio de Asuntos Exteriores rumano en un comunicado de prensa.

La diplomacia rumana subrayó que tiene “carácter puramente defensivo, en plena conformidad con las disposiciones relevantes de la Carta de la ONU.”

“Esta posición es compartida con la Alianza Noratlántica, aspecto que está incluido en la Declaración final de la Cumbre de la NATO en 2016, cuando se decidió la integración del sistema de Deveselu en el sistema Aliado de defensa antimisiles”, prosiguió la nota.

“En consecuencia, la perpetuación en el espacio público de una retórica que no tiene cuenta con todos estos elementos no es adecuado y tampoco facilita una discusión constructiva”, concluyó el comunicado.

La reacción de Bucarest se produjo tras las declaraciones de Alexandr Botszan-Jarchenko, jefe del Departamento Europeo del Ministerio ruso de Exteriores, quien declaró a la agencia Interfax que “la postura de Rumanía y de sus dirigentes, que han convertido al país en un puesto de avanzada (de la OTAN), es una clara amenaza para nosotros”.